Un día nació
Su madre estaba tan drogada que no llegó a enterarse.
Su padre… quien sabe… podían ser tantos que nunca le
preocupó averiguarlo.
Sintió frio y alguien la abrigó.
Fue a parar a una casilla donde se amontonaban muchos pibes
como ella.
A su madre nunca más la vio.
Fue iniciada en la prostitución a los once años, justo un
día antes de cumplirlo. Un individuo sucio y borracho pagó para llevarla al
cuarto dispuesto para tales menesteres.
No le interesó. Le daba lo mismo. Uno más y este dejaba
guita. No era el primero.
Cuando cumplió quince conoció a Pedro. Creyó que lo amaba. El
le proveía de la droga y el alcohol que le hacía falta.
Pensó que tal vez podía ser distinto. Pero nada cambió.
Un día intentó irse, cambiar esa vida a la que había sido
escupida sin pedirlo.
La paliza fue feroz. Una cicatriz que cruzaba la frente de
arriba abajo le recordaba que no podía, que todo intento sería en vano.
La encontraron cuando notaron que hacía unos días que no se
la veía trotando por las calles de barro y sangre.
Parecía dormida. Diagnosticaron una sobredosis. Los ojos
abiertos, en un último espasmo, miraban, sin ver, el triste mundo que le había tocado en suerte.
Un micro-relato de Alberto Colonna
La imagen pertenece a Internet (google)
La imagen pertenece a Internet (google)
¡Es una terrible realidad! Muy triste muy cierto!
ResponderBorrarHe escrito una trilogía. Mañana cuelgo la última. es un poco de los mundos paralelos. esos mundos que existen y que tratamos de ignorar. No lamentamos porque no podemos comprar el último celular, o no podemos ir al cine. todo es válido. cada quien siente donde le aprieta el zapato. desgraciadamente sto tambien es real. gracias hermano por tu comentario.
BorrarQuiero creer que las almas de esos desposeídos del planeta tierra, después de su no vida terrenal, son los ángeles predilectos y más cercanos a Dios junto a Jesús quien fué torturado hasta morir en la cruz por predicar el perdón y el amor al prójimo.
ResponderBorrarOjalá asi sea Nelson, pero esto no debería suceder. Está ocurriendo hoy cuando la sociedad se preocupa por cosas treméndamente banales. el desinterés es tremendo. gracias por leerlo y por tu comentario.
ResponderBorrarJo, es tan macabro!! y sin embargo es así. Nacidos sin futuro alguno ni remedio para evitar su fin. Qué crudo puede llegar a ser el mundo!!
ResponderBorrar