Camino sin cesar sobre las piedras
rudas, punzantes, como espadas.
Me van abriendo heridas solapadas
en las entrañas que el camino encierra
Busco horizontes y no encuentro el día,
ni el paisaje sereno o la distancia.
El desierto feroz en mí se escampa
y se esparce como una letanía.
No sé que soy, ni mi partida.
Donde mis huesos hollarán la tierra.
Un sueño voraz, en mí, se aferra
buscando pertinaz una guarida.
Creo en el sol que da en mi frente,
Y en el pavor atroz que rompe el trueno.
Cruzo montañas, me arrastro por el cieno.
Gira la aguja, siniestra, permanente
Solo me empuja un loco desenfreno,
el silencio que oigo en lejanía.
No sé si solo es la locura mía
o el recuerdo de un mundo que no entiendo.
Pero sigo en mi trazo de miserias.
Sol adentro, corazón afuera,
Y será lo que la suerte quiera
mientras tenga valor y den las fuerzas.
Porque todo es andar y al fin del día,
Sin hacerse preguntas pretenciosas,
Te clava las espinas esa rosa
que luego aroma el aire que respiras.
Y todo se entremezcla y no pretendas,
ya la brújula voltea enloquecida.
Es que aquí estás
para vivir la vida.
Te parieron, fue un
don… aunque no quieras.
Haber sido parido es un don, que marca el sino de recibir aromas de rosas con las púas del.camino. Palabras que al unirse en bella poesía, son como el embriagante perfume de las rosas, atempera la recepción del olfato ante el aroma verdadero y trágico.
ResponderBorrarLos volcanes están erupcionando ¿se habrá enojado la tierra? La vida es un don ¿Es un don? ¡Qué difícil que es todo! Gracias Mirta por tu comentario.
ResponderBorrarSi! Coincido con Mirta, la vida es un don, aunque tropezemos con mil piedras...vale la pena. Creo que eso se ve luego...cuando pasa la tormenta y te das cuenta de que todo pasa...siempre. Como creo que tienes un don maravilloso para poder entrelazar reflexiones como estas y que encima, suenen con esta mágica musicalidad. Muy contenta de leerte y compartir! Besos chicos! Mirta y Alberto
ResponderBorrarGracias Soledad. Tus elogios me hacen treméndamente feliz, No porque sea cierto sino porque cuando lo dice una amiga como vos llega, muy adentro. Muchas veces mis poemas son reflexiones en voz alta. Ojalá sirvan de alguna manera. Coincido con lo que decís pero es muy bueno que no sea yo, lo diga. Un beso enorme amiga. Felices de tenerte con nosotros.
ResponderBorrarClaro que la vida merece la pena vivirla... es más, no es un don, sino un privilegio del que hay que ser consciente y cuidarlo mientras dure. Un poema reflexivo, pero también con una gran profundidad en lo que dice Alberto, un saludo!!
ResponderBorrarY alli vamos Sonia. Con una sonrisa plantada en el rostro aunque por dentro nos duelan las entrañas. La vida es eso. Ocasos y madrugadas. a veces no están ni el sol ni la luna pero verás que pronto vuelven a alumbrarnos. y seguimos ¿Hasta donde? ¿Hasta cuando? ¿A quien le importa? Vamos andando mientras nos den las fuerzas. Un abrazo querida amiga. Gracias por tu comentario.
ResponderBorrarPrecioso Alberto......entrañable !!!
ResponderBorrarGracias Anita. el mundo da vueltas y las circunstancias se repiten y aquello que quedó en el arcón de los recuerdos de pronto aparece flotando con una actualidad que te sorprende. Y así estamos. yendo y viniendo. Pero por sobre las nubes el sol siempre está, hoy lo puse en el saludo que siempre hago para reconocer la compañía a veces tan importante de los amigos virtuales. Te queremos mucho Ana. Gracias por tu comentario.
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