EL PARAISO O EL INFIERNO

Cuando uno expone sus trabajos al publico puede tener una respuesta agradable o ser ignorado olímpicamente. Pasamos del paraíso al infierno en pocos instantes. Y uno debe hacer el ejercicio de construir lo que le gusta sin importarle lo que el otro piense. Si algo es bonito para mi deberá ser suficiente. Es un ejercicio difícil. Las caricias son agradables, pero lamentablemente hoy las manos están para otra cosa.

domingo, 27 de octubre de 2013

ATARDECER EN LA AUTOPISTA


ATARDECER EN LA AUTOPISTA

La gente vuelve presurosa de sus trabajos.
El día está tocando a su fin.
El sol se resiste a irse y se extiende en una llamarada ígnea que ilumina el horizonte.
La noche vendrá y con ella el reparador descanso.
Mañana será otro día.