Cuando decidimos viajar a La Rioja, los expertos me
aconsejaron que no fuera a la Capital, que era sucia y no tenía nada de interés
y que era mejor que me alojara en Chilecito. Menos mal que no les hice caso.
Cuando llegamos a nuestro destino pasó otro tanto, en la agencia de información
turística insistieron en que nos fuéramos a Chilecito. Debo confesar que mi
esposa y yo somos igual de cabeza duras y aun así decidimos quedarnos. No sé cuál
es la intención, pero es terrible hasta donde pueden hacer daño los guías e
informadores turísticos cuando se mueven tras ciertos intereses y uno llega a
creerles!!!
Nos alojamos en uno de los buenos hoteles, con todas las
comodidades de la tecnología actual, desayuno buffet y cochera incluidos. Y una
ubicación perfecta para nuestros recorridos.
La ciudad nació precisamente en la plaza frente a la que
nosotros nos encontrábamos, con la Catedral a un lado y, calle por medio, la
casa de gobierno. A partir de sus cuatro esquinas salen las correspondientes
peatonales de una cuadra de extensión pero todas terminan en una iglesia
diferente. Yen los alrededores encontramos una serie de museos increíblemente
interesantes.
En una visita a La Rioja, eso si hay que tener en cuenta
tres cosas sumamente importantes para el turista. En primer lugar la siesta
riojana. Es sagrada. A partir de la 12, en el mediodía, todo se cierra. Si no
has almorzado y buscas un restaurante olvídalo, hasta las 5 de la tarde (17 hs)
no hay remedio. En segundo lugar, a pesar que es una zona de muy pocas
precipitaciones, la época de las lluvias va desde Octubre hasta principios de
Marzo. Hay que saber elegir cuando se la visita. En tercer lugar, si te toca un
día de lluvia, hay que tener en cuenta que no existen ls desagües pluviales, el
agua corre por la calle velozmente y si no tienes botas terminas empapado hasta
los tobillos.
Los riojanos son geniales. Amabilísimos y serviciales. La
señalización es tremendamente deficiente y a veces cuesta mucho hacerles
entender hacia donde uno quiere ir, a pesar que se desviven por ayudarte.
Hay una ruta, muy buena, que recorre el borde del cordón de
las sierras de Velazco, es lo que se conoce como corredor de la costa (¿?).
cuando llegas a Anillaco, pueblo famoso por ser el origen de un ex presidente,
el camino se reparte en dos. Uno que va a la población y el otro que no tiene
indicación alguna. Lo increíble es que es el camino que conduce al Señor de la
Peña, un sitio de veneración y peregrinaje. Una roca en medio de una planicie,
alejada de las demás y de un tamaño mucho mayor, que mirada desde un ángulo
especial tiene la forma de un perfil humano. Muchos lo veneran suponiendo que
es la cara de Jesús. Pero el verdadero milagro es encontrarlo porque no hay ni
una sola indicación.
A un lado del señor de la Peña se encuentra el Barrial de Arauco.
El Barrial de Arauco es una enorme superficie de 7 km de
largo por 4 de ancho, que por la temperatura reinante y las escasas
precipitaciones forma una pista ideal para la práctica del carrovelismo y el
kiterbuggy. Hay un complejo llamado los Vientos del Señor donde hay cabañas y
se pueden conseguir todos los elementos para la práctica de este deporte. Este
se realiza solamente los fines de semana motivo por el cual no pudimos verlo,
aunque el paisaje solo vale la pena.
Finalmente llegamos a Aimogasta y allí como en una obra
Kafkiana perdimos el rumbo. No pudimos encontrar como continuar hacia el norte
y cada vez que preguntábamos nos mandaban siempre para el mismo lado por donde
habíamos llegado. Alguien hasta se ofreció a acompañarnos con su moto para
encontrar el camino, pero todos nos llevaron indefectiblemente al comienzo.
Consecuencia nos volvimos mansamente y dejamos el resto para otra oportunidad.
Finalmente les dejo un video de un túnel que atraviesa la
montaña en la localidad de Sanagasta y el corte abrupto del mismo es porque un
poquito más adelante había un puesto policial y el que venía filmando y
manejando a la vez era yo y no creo que les gustara demasiado.
La Rioja ofrece múltiples posibilidades de conocimiento y asombro, pero la indiferencia conque se manejan todos (incluidos sus pobladores), es terrible. En El Cañón de Talampaya encontramos cantidad de turistas, interes hay, pero esas cosas de nuestro país, "¿paque te vai a calentar?".
ResponderBorrarAyer, cuando contábamos nuestras peripecias en familia, mi nuera me dijo "entonces, no vuelven más", todo lo contrario el lugar lo vale, si se cuadra allí estaremos nuevamente.
Tus filmaciones de túneles, caminos sinuosos, etc, mientras manejas, son una historia aparte que creo que solo yo tolero..., mi corazón se salta algún latido, pero en fin...
uno se siente alla. es bonito ir descubriendo tantas cosas lindas relatadas de manera tan formidable.
ResponderBorrarLa Rioja tiene historia que contar, lo triste es que están un poco despistados con el tema del turismo (les pasa lo mismo en la zona de Guadalajara) que por cierto si no conoces el Parque Natural del Alto Tajo ¡Es una preciosidad! Su pongo que con el tiempo irán aprendiendo a cuidar, mimar y sobre todo a identificar los caminos y lugares para los visitantes. Estoy totalmente de acuerdo en tu apreciación sobre los intereses partidistas de algunas agencias.
ResponderBorrarRecibe un cordial saludo desde Barcelona.